Antonia – Vivamos su historia

¿Quién es Antonia?

En el punto más alto de la carretera interamericana de Guatemala se encuentra la zona conocida como Alaska por su característico clima frío y nuboso. Al dejar el asfalto y adentrase en las colinas se llega a uno de los lugares más encantadores del Altiplano, ahí se encuentra la Aldea Chiquix del municipio de Nahualá, hogar de Antonia Ixquiar y su familia integrada por su esposo y sus 9 hijos.

Antonia representa a cualquier madre guatemalteca, ella da todo por sus hijos e hijas. En el año 2009 ocurrió algo que cambió su vida y la de toda su familia. Toda la comunidad fue convocada a una asamblea donde se presentaría un nuevo proyecto de educación.

Antonia Ixquiar - CEIBI 2

La educación bilingüe...

Vivamos Mejor presentó a Chiquix los Centros de Educación Inicial Bilingüe Intercultural - CEIBI -, un espacio de estimulación temprana para los más pequeños de la familia, aunque todos desconocían la importancia de una educación inicial se mostraron interesados en el proyecto, sin embargo al proponer la creación de una Junta Directiva para gestionar el proyecto se generó un conflicto.

Se propuso una Junta conformada únicamente por madres, pero la reacción del COCODE no fue la mejor, ¿Una junta directiva conformada solo por mujeres? Era algo inverosímil, si los hombres eran quienes tomaban las decisiones en la comunidad, las mujeres no opinaban, solo debían dedicarse a los hijos y al hogar. Al final, la Junta fue conformada y el CEIBI se estableció en la comunidad, pero las integrantes tenían miedo de participar por lo que dirían sus esposos.

Incluso Antonia que no formaba parte de la Junta en ese momento dudó si era de beneficio llevar a su hija al CEIBI y sobre todo porque creía que estaba muy pequeña para asistir a un centro educativo. Ahora ella menciona que en ese entonces no estaba sensibilizada sobre la importancia de la estimulación temprana en los hijos.

Un cambio de vida positivo...

Luego de 3 años, Antonia fue elegida para ser parte de la Junta, un acto que marcó un giro en su vida, decidió que no tendría más miedo de hablar, de dar su opinión y trabajar por que sus hijos recibieran la mejor educación. Antonia dejó de ser la misma, ahora puede contar con orgullo toda su recorrido por las organizaciones de la comunidad, empezó como tesorera en CEIBI, luego fue elegida como presidenta del programa Líderes Infantiles, y actualmente preside las juntas comunitarias del programa Mujer y Desarrollo, así como la de la iglesia a la que asiste.

Definitivamente, esto no lo hubiese logrado sin el apoyo incondicional de su familia que la motivaba, especialmente los días en que las reuniones se extendían y llegaba tarde a casa, nunca fue recibida con reclamos de su esposo por descuidar sus tareas del hogar o a sus hijos, al contrario él le decía a los pequeños que prepararan el tuj (temazcal) porque su mamá regresaría cansada y se merecía un descanso.

Aunque el camino no fue fácil, algunas de sus compañeras no podían participar activamente por el pensamiento de sus esposos, e incluso Antonia recibió algunas burlas de sus vecinos por trabajar tanto sin recibir una remuneración, se cuestionaban sobre si estaría ganando algo más. Pero Antonia no se desmotivó, tenía clara su visión: la mejor educación que sus hijos e hijas puedan recibir. Ahora cuenta los logros que alcanzó gracias a las gestiones que se hicieron cuando las madres administraban el CEIBI.

El CEIBI ha cambiado la vida de los hijos de Antonia, sin embargo, su vida también tuvo un cambio
positivo, pasó de vivir en un entorno machista que oprimía la voz de las mujeres, a sentirse
empoderada, ahora ella no tiene miedo al hablar. Ella nos deja con una reflexión:

CEIBI es vida,
algunos no se han dado cuenta, pero es un cambio de vida positivo.”

Ixim, significa maiz...

Ixim CEIBI

Ixim es la primera hija de Antonia que asistió a CEIBI, a pesar de que tenía tan solo 3 años, aun recuerda como disfrutaba ir al CEIBI con sus compañeros y jugar en el bosque cercano a la escuela, también las fábulas que la maestra les contaba.

Ahora Ixim está en tercero básico, y reflexiona cómo la educación inicial bilingüe intercultural impactó positivamente en su vida, ella valora su educación, toda su primaria fue abanderada y en básico fue elegida como "Señorita Instituto", menciona que quienes quedaron en segundo y tercer lugar también eran exalumnas de CEIBI. Antonia puede percibir cómo los niños y niñas que asistieron a CEIBI son líderes dentro de la escuela, y positivos porque motivan a sus compañeros de clase a tener un excelente rendimiento escolar.

Ixim se hizo acreedora el año pasado de una beca para estudiar segundo básico gracias a su esfuerzo y los méritos recibidos. Su sueño es graduarse de diversificado y adquirir conocimientos técnicos para aprender sobre mecánica automotriz.

"Quiero tener mi propio taller. Un día poder devolverle a mis papás un poco de lo que ellos me han dado."

Redacción: José Z

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